La preparación

Los hábitos alimenticios, según demostrado científicamente, son los principales responsables a la hora de prevenir el riesgo de contraer enfermedades (como p.ej. el cáncer) a través de: la elección de los alimentos, la preparación y la cantidad. (1)

Cocer

Siempre cuando sea posible debemos evitar procesos de cocción a temperaturas muy elevadas, como p.ej. freír. Alimentos quemados no deben consumirse. Carne o pescado a la plancha debe consumirse con moderación. No se recomienda comer alimentos ahumados, curados o muy salados con frecuencia.

Una cocción cuidadosa, tanto para verduras como para carne o pescado, es recomendable. Se precisa poca grasa, el sabor natural de los productos destaca más, el alimento no se reseca ni se quema y las sustancias nutritivas se conservan.

La cocina macrobiótica se centra en el efecto que tienen los alimentos en el cuerpo según su estado natural y su preparación y los clasifica en alimentos: caloríficos, contrayentes, expansivos… Es un tema muy interesante, para todos aquellos que quieren averiguar más. (2)

 

(1) Deutsches Institut für Ernährungsforschung (DIFE ) Instituto Alemán de Nutrición Humana (DIfE).

(2) Annemarie Colbin: El poder curativo de los alimentos.

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